Grupo de la ONU dice que las personas abusadas por el fallecido productor de una boy band japonesa merecen disculpas y compensación

TOKIO – Los hombres que denunciaron que fueron abusados ​​sexualmente cuando eran adolescentes por el productor de una banda japonesa Johnny Kitagawa ahora tienen un oyente poderoso: las Naciones Unidas.

Damilola Olawuyi, presidente del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Empresas y Derechos Humanos, dijo a los periodistas el viernes que el número de víctimas podría ascender a varios cientos, y acusó a los principales medios de comunicación japoneses de guardar silencio sobre los presuntos abusos durante décadas.

Olawuyi planteó serias dudas sobre la sinceridad de la respuesta de la agencia de talentos fundada por Kitagawa, Johnny & Associates. Instó a otros actores de la industria del entretenimiento a llevar a cabo una “investigación transparente y legítima con un cronograma claro”.

Junya Hiramoto, uno de los siete hombres que hablaron con el equipo de Olawuyi, se conmovió hasta las lágrimas por los comentarios del funcionario de la ONU.

"Sentí que nuestro mensaje había sido transmitido claramente", dijo. "Me dieron mucho coraje".

Pichamon Yeophantong, miembro del grupo de la ONU que apareció con Olawuyi en el Club Nacional de Prensa de Japón en Tokio, instó al gobierno japonés a hacer más.

"Este caso pone de relieve la necesidad de que el gobierno, como principal responsable, garantice investigaciones transparentes de los perpetradores y que las víctimas obtengan recursos efectivos, ya sea en forma de disculpas o compensación financiera", dijo.

Olawuyi y otros expertos han estado en Japón desde el 24 de julio. Se reunieron con funcionarios gubernamentales, defensores de los derechos humanos, sindicatos y empresas para conocer cómo las empresas pueden estar violando los derechos humanos y dañando el medio ambiente.

Está previsto que en junio se presente un informe completo al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que incluirá recomendaciones para el cambio.

Lo más importante en la agenda del Grupo de Trabajo fueron los hombres que alegan haber sido abusados ​​sexualmente cuando eran niños por Kitagawa, quien era una figura poderosa en la industria del entretenimiento de Japón antes de morir en 2019. El director de Johnny & Associates se disculpó en mayo.

Los críticos dicen que lo ocurrido en Johnny's, como se conoce a la empresa aquí, es vergonzoso e indicativo de cómo Japón, supuestamente una potencia democrática y económica, está rezagado en la protección de los derechos humanos.

Los hombres que se han presentado dicen que Kitagawa abusó de ellos en su lujosa mansión de Tokio, así como en otros lugares, como su automóvil y hoteles en el extranjero, mientras actuaba como bailarines y cantantes.

Kitagawa nunca fue acusado. Fue venerado a lo largo de los años, aunque de vez en cuando aparecían acusaciones de abuso, que finalmente fueron ignoradas.

"El peor caso de abuso sexual en la historia de la humanidad está viendo la luz", dijo Shimon Ishimaru, uno de los siete acusadores que se hicieron públicos. “Este problema es real. Realmente sucedió”.

Johnny's, que todavía está prosperando, creó un panel de investigación, pero no está claro qué planea lograr. Ishimaru y otros dijeron que estaban escépticos porque no habían recibido la atención de salud mental que prometió la empresa.

En respuesta a una solicitud de comentarios de The Associated Press, Johnny & Associates dijo que todos los asuntos se están tratando como parte de la investigación.

Después de que se emitiera un documental de la BBC sobre Kitagawa este año, el músico Kauan Okamoto habló en abril en el Club de Corresponsales Extranjeros de Tokio, la primera persona en décadas en hacer tales acusaciones bajo su nombre real.

Associated Press no suele identificar a las personas que dicen haber sido agredidas sexualmente, pero los acusadores recientes de Kitagawa decidieron ser nombrados públicamente en las noticias.

Kitagawa presentó una demanda por difamación contra el semanario Shukan Bunshun después de que publicara una serie de artículos en 1999 basados ​​en entrevistas anónimas con ex artistas que dijeron que los obligó a tener relaciones sexuales.

Unos años más tarde, la Corte Suprema de Japón confirmó el fallo de un tribunal de apelaciones a favor de Shukan Bunshun, diciendo que los testimonios de los acusadores eran confiables y que lo que dijeron realmente había sucedido.

Lo que Japón haga ahora puede terminar siendo una prueba de fuego para un país donde la revisión legal que prohibió oficialmente la violencia contra los niños entró en vigor hace sólo tres años y donde los informes sobre abuso y negligencia infantil abundan. Japón elevó la edad de consentimiento sexual de 13 a 16 años sólo este año.

Akimasa Nihongi, uno de los siete hombres que hablaron con los funcionarios de la ONU, dijo que personas como él ya habían sufrido suficiente. Elogió las acciones de la ONU como un gran paso adelante.

"Una voz colectiva puede sonar fuerte y clara", afirmó Nihongi.

“El Grupo de Trabajo de la ONU escuchó sinceramente lo que dijimos. Y ahora han hablado”.

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Yuri Kageyama está en Twitter https://twitter.com/yurikageyama